Por suerte se acaba la cuenta regresiva. Y ya no hay nada que no sepamos del casamiento de año. Así que no agregaremos mucho más.
Ya sabemos que Antonela es siemplemente Antonela y no «Antonella» como creíamos. Sabemos qué van a comer, beber y volver a comer. Conocimos las habitaciones dónde se alojarán los huéspedes y nos mostraron los aviones privados en donde llegaban los trajes de ellos y los vestidos de ellas.
También nos contaron de los padrinos y de las madrinas de la boda. Sabemos casi todo de ellos. Nos leyeron la carta que publicaron los «trapitos» rosarinos para que les permitieran trabajar en las inmediaciones. Nos mostraron «brujitas buenas» y numerólogas, haciendo predicciones sobre la feliz pareja.
Nos contaron cómo se peinaría la novia y sus madrinas. Vimos bajar personalidades ilustres del mundo de aviones privados. Los aviones llegaban uno tras otro. La gente tan importante, no suele compartir aviones. Nos mostraron el auto en el que,supuestamente, llegaba Shakira, aunque solamente vimos una sombra de mujer con la cara tapada con una gorrita.
Nos dejaron espiar el lobby, el salón, el casino y las instalaciones del hotel. Nos mostraron una fila de periodistas tratando de «pispear» algo, desde afuera, que todavía no se haya dicho. y nos mostraron, nos mostraron y nos seguirán mostrando… Nos mostrarán todo sin mostrar nada…
Nos dijeron que la revista HOLA compró todos los derechos de trasmisión y que nosotros solamente podremos espiar lo que nos permitan por el ojo de la cerradura.
Se casa el mejor jugador del fútbol del mundo. Y nosotros ya sabemos todo lo que hay que saber…
Muchas Felicidades Lío querido…
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