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A mi querido amigo de autoestima baja: te va mal porque sos gil!!!

Quería en esta ocasión confirmar tus temores y decirte que si, verdaderamente sos un pelotudo, y lo bien que hacés pensando esto de vos. Por Clara Rodríguez.

Ha sido terrible tener que aguantarte todo este tiempo, eras una máquina insaciable de devorar cumplidos, me ponías en el brete de inventar adjetivos calificativos, exagerar, y hasta mentir, con lo que sabés que no me gusta hacerlo.

No sabía si decirte esto, pero el sábado nos juntamos y todos coincidimos en que sos un boludo que esconde su soberbia bajo esa máscara de inseguridad. Estamos agotados de turnarnos para decirte lo maravilloso que sos, mientras todos intentamos, con mucho esfuerzo, tener una vida, que según vos la fortuna nos ha obsequiado y a vos te ha privado. También coincidimos en que tarde o temprano nos vas a terminar cagando, ya no conforme con nuestro amor y elogios, vas a querer tomar lo que es nuestro para sentirte por un rato tan bien como nosotros. Hasta teníamos planeado esperarte afuera de tu casa para cagarte bien a palos, pero creemos que deberías hacerlo vos mismo, por respeto a nosotros y al resto del mundo, así demostrando que esa inseguridad y ese desprecio por vos mismo eran certeros, y no que solamente tuviste esa actitud toda tu vida para obtener ventaja y un poco más de amor que el resto.

En fin… esta carta es para decirte que me tenes podrida con tu discurso plasta y tus llamadas a cualquier hora. NO ME DAS LASTIMA!!!!!te va mal por que sos gil!!!

Ponele onda, ni tu familia te aguanta, verdaderamente lograste convencernos a todos de lo inmundo que sos. Podrías regalarnos un rato agradable a todos y decirnos algo lindo alguna vez,no?NO DE VOSSSSSS, ya que las únicas veces que te animas un poco es para tirarte algunas flores y todos tenemos que aplaudirte, ya que has logrado subir un peldaño en el duro camino que es tu vida.

Dejá de una vez de joder con que te vas a matar, ya fue esa, y a estas alturas ni me importa. Hacé lo que tengas que hacer, pero lejos mío, no me salpiques.

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